En La República salió una columna que habla de los malos jefes como una de las principales causas para renunciar, esto ha sido probado en estudios,  incluso hay una expresión popular que dice que “las personas no dejan sus empleos, dejan a sus jefes”. Todos hemos tenido, en algún momento de nuestra carrera, la desdicha de trabajar bajo la supervisión de un mal jefe, y todos hemos visto cómo estos líderes ineficaces tienen un impacto devastador en una organización. 

“Los malos jefes son aquellos que no tienen en cuenta al ser humano con quien trabajan, sino que solo se enfocan en el número y el resultado; asfixian y acosan hasta un domingo; no escuchan, opacan con cualquier mínimo error y tienen doble personalidad con los superiores y su grupo de trabajo”, dice Claudia Dulce Romero en su columna, pero lo más preocupante de la situación, además del ambiente laboral tóxico, es que los conductos regulares no funcionan y los trabajadores prefieren lidiar solos el problema antes que denunciar la situación por temor a represalias o incluso a perder su trabajo. 

Por eso, en la mayoría de blogs que se escriben sobre el tema la solución es personal, y un poco desalentadora. En el texto de Romero, por ejemplo, cita algunas acciones para sobrevivir a un mal jefe mientras se consigue un nuevo trabajo, todo esto después de declarar: “La principal recomendación frente a los malos jefes sería informar a recursos humanos, pero este no es un mundo perfecto y a veces los conductos regulares no funcionan”.

Esto es muy cierto, es más, quien debe lidiar con los problemas, que van desde quejas hasta la alta rotación, es el área de recursos humanos. Por eso te presentamos algunas ideas para abordar esta problemática:

1. Fomenta la comunicación:

Anima a los empleados a hablar abiertamente sobre sus preocupaciones con su jefe y proporciona un canal de retroalimentación confidencial para que puedan expresar sus inquietudes.

2. Entrena al jefe:

Ofrece programas de formación en liderazgo para ayudar al jefe a mejorar sus habilidades de gestión y a ser más consciente de su impacto en el equipo.

3. Consigue un mediador: 

Si las cosas están tensas, considera traer a un mediador para ayudar a resolver los problemas y mejorar la relación entre el jefe y su equipo.

4. Políticas de intervención: 

Establece políticas y procedimientos claros para tratar con jefes problemáticos, y asegúrate de que haya consecuencias si no mejoran su comportamiento.

5. Capacita a los empleados:

 Ofrece capacitación en asertividad y resolución de conflictos a los empleados para que puedan enfrentar de manera efectiva un mal jefe.

6. Brinda apoyo emocional: 

Proporciona servicios de asesoramiento o bienestar para apoyar emocionalmente a los empleados que están lidiando con un mal jefe.

7. Haz una evaluación 360 grados: 

Implementa evaluaciones de 360 grados para recopilar opiniones de subordinados, compañeros y supervisores sobre el jefe, lo que ofrece una visión más completa.

8. Seguimiento constante:

Mantén un registro continuo del desempeño y comportamiento del jefe problemático para tomar medidas oportunas.

9. Reubica o cambia el rol del jefe problemático:

Evalúa si es posible cambiar al jefe a otro puesto que se ajuste mejor a sus habilidades o retirarlo del equipo si es necesario.

10. Fomenta una cultura de respeto, inclusión y ética en la empresa para prevenir la aparición de jefes problemáticos y promover un ambiente de trabajo saludable.

Recuerda que, para que los empleados confíen en ti en el proceso y puedas realizar todas tus tareas en armonía, debes adaptar evaluar tu situación específica y siempre mantener la confidencialidad y el respeto en cada acción que realices.

Bibliografía

Romero, Claudia Dulce. (2023). Renunciar por un mal jefe. Recuperado de: https://www.larepublica.co/analisis/claudia-dulce-romero-3553438/renunciar-por-un-mal-jefe-3727281?utm_term=Autofeed&utm_medium=Social&utm_source=LinkedIn#Echobox=1697192929 

Computrabajo. (2019). Un mal jefe aumenta la rotación del equipo. Recuperado de: https://recursos-empresa.computrabajo.com/un-mal-jefe-aumenta-la-rotacion-del-equipo/ 

LHH. (2023). Cómo domesticar a un mal jefe. Recuperado de: https://www.lhh.com/es/es/insights/como-domesticar-a-un-mal-jefe/#:~:text=Se%20recomienda%20adoptar%20un%20enfoque,Intentar%20comprender%20las%20posibles%20motivaciones